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Cuando estás un tiempo sin practicar deporte, el primer síntoma visible es la pérdida de agilidad. La agilidad nos permite realizar movimientos rápidos e influye en otros factores como el equilibrio y el control de nuestro cuerpo. Hay que tener en cuenta que la agilidad física y agilidad mental están relacionadas entre sí, por lo que se refleja en las actividades que el cuerpo y la mente realizan en el día a día. Para empezar a recuperar tu agilidad solo necesitas tener una actitud positiva e incluir varios ejercicios en tu rutina diaria. A continuación, cinco ejercicios que te ayudarán a mejorarla:

Saltar a la comba

No hay ejercicio más completo que saltar a la comba. Puedes practicarlo en cualquier sitio, trabajas la parte inferior y superior del cuerpo, quemas una gran cantidad de calorías y ejercitas la coordinación, algo fundamental para mejorar la agilidad.

Running al aire libre

Salir a correr al aire libre con regularidad te garantiza recuperar tu agilidad en poco tiempo. Además de producir endorfinas, quemar calorías y liberarte del estrés. Sólo necesitas un calzado adecuado para ello, disfrutar de un fantástico paisaje natural y lanzarte a la aventura.

Nadar

La natación es uno de los ejercicios físicos que más beneficios aporta al cuerpo. Refuerza la musculatura y las articulaciones, te aporta flexibilidad, favorece la coordinación y la agilidad física y mental. Nada en el mar o en la piscina, lo importante es que lo hagas con asiduidad. Practicar natación tres veces por semana mejorará tu agilidad y tu condición física.

Subir y bajar escaleras

Un gesto tan cotidiano como subir o bajar las escaleras aporta grandes beneficios a tu condición física. Deja la pereza a un lado, utiliza el ascensor y recupera tu agilidad física y mental. Usando las escaleras, evitarás las esperas y te sentirás mucho mejor.

Ir en Bicicleta

Si vas en coche o moto a tu lugar de trabajo, anímate y sustituye tu vehículo de transporte habitual por una bicicleta. Además de contribuir con el medio ambiente y pasar un rato de entretenimiento, fortalecerás tus piernas, las articulaciones y mejorarás considerablemente tu agilidad.

 Tanto si tu propósito es poseer la agilidad que antes tenías, como comenzar a llevar un estilo de vida más saludable, incorporar a tu estilo de vida ejercicios sencillos como subir escaleras, correr o saltar a la comba, no sólo te harán sentir mejor contigo mismo, además te harán readquirir tu agilidad. Mantener tu agilidad en constante estimulación hará que la conserves por mucho tiempo.