Las carreras de ultraresistencia, aquellas cuya distancia supera los 42,195 km, están en auge. Cada vez son más los deportistas que se atreven a desafiar este tipo de competiciones.

La preparación física, nutricional y psicológica se hace indispensable para afrontar con garantías y evitar así problemas derivados de una mala planificación: abandonos, lesiones, fatiga extrema o, en el peor de los casos, fallidas. Dentro del apartado nutricional explicaremos (de una forma muy resumida) aspectos a tener en cuenta la hora de hacer frente a esta distancia:

• Previsión: la preparación debe realizarse con tiempo. Las prisas nunca han sido buenas y menos cuando hablamos de salud. Este tipo de distancias requieren de una preparación previa de mínimo 3 meses.
• Periodización: dividir los objetivos a lo largo de los meses. Se puede empezar por reajustar la composición corporal (obteniendo el peso, grasa y músculo óptimos para la competición) e ir añadiendo pequeños “desafíos” al largo de los meses. Es importante en esta fase que el atleta sea consciente que no rendirá a su máximo nivel.
• Fase de pruebas: en la que podemos empezar a probar qué alimentos utilizaremos el día de la prueba. Es importante que haya una relación directa entre nutricionista y atleta para tratar de encontrar la mejor solución para ambos
• Fase de adaptación metabólica: esta fase debe estar siempre supervisada por un nutricionista deportivo. A partir de diferentes estrategias nutricionales, se busca la eficiencia del corredor en cuanto al uso de los diferentes sustratos energéticos. Un corredor preparado para utilizar grasa como fuente energética tiene una gran ventaja sobre sus rivales.

Dentro de cada fase podemos encontrar subfases que serán pautadas y programadas en concordancia a la evolución del proceso.

• Jordi Costa Gómez

  Dietista – Nutricionista

  Nº col. CAT1149

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